...hoy hemos desarrollado un entrenamiento de altura. Santi y yo nos propusimos a consejo de Antonio (guardián del refugio) completar el círculo que comienza en el Centro de visitantes, discurre por el camino de las 7 cañadas, sube por el sendero 23 a Pico Viejo y tras alcanzar la Rambleta descender hasta el Refugio y desde allí completar el recorrido por el sendero 7 y el 6 que nos devuelve al punto de partida. Así lo hicimos. Comenzamos bien temprano, a las 8 a.m. Los 15 km de la pista de las cañadas lo hicimos trotando y tras 1h5om estabamos en el Parador.
El sendero 23, es un sendero duro, de extrema dificultad. Si bien en sus inicios aparece claro y es dificil extraviarnos, al cabo de una hora se vuelve borroso e imposible de identificar. No obstante logramos dar de nuevo con él para así culminar su objetivo, Pico Viejo. Desde allí, subir hasta la rambleta resulta algo tedioso por la inmensidad de la colada. El descenso tiene un descanso en el refugio donde nos recibe Antonio, hombre de enorme corazón, amigo de los montañeros que sabe de aventuras y de glorias. Nos invita a una sopa caliente y a un buen vino. Su charla siempre regocija. Seguimos descendiendo para completar el círculo y tras 8 horas y 18 minutos volvemos al aparcamiento. Bello recorrido, fantástico esfuerzo. Merece la pena vivirlo.
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